Compañía Zirkus Frak / Jorge Albuerne
Zirkus Frak es Jorge Albuerne. Nacido en Uvieu (Asturies) un año antes de la muerte del dictador, es licenciado en Bellas Artes por la Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU) y desde 1998 se ha estado formando y practicando disciplinas relacionadas con el mundo del movimiento y la danza y ha formado parte de compañías como Las Malqueridas o RaraAvis.
En el año 2000 el artista comienza formaciones específicas en el entorno las disciplinas circenses, entre ellas portés acrobáticos, mini volante y el mástil chino. Albuerne ha acompañado y coordinado procesos creativos en los roles de mirada externa, dirección, búsqueda de material y escritura. También ha creado espectáculos en solitario como Señora!!!, KunFú (hundido), Anderdesí o Indomable. Además, ha participado como a intérprete y co-creador en diversos proyectos colaborando con otros creadores como Rosa Muñoz, Cecilia Colacrai, José Luis Redondo, Antic Teatre, La Poderosa, Les Antonietes, Circ Raluy, entre otros.
Albuerne ha formado parte de varias compañías que han intentado trabajar siempre desde esta interdisciplinariedad entre artes plásticas, movimiento, circo y escritura. Con esta intención nace Zirkus Frak. Actualmente, el artista continúa en las tareas de intérprete, creador y acompañamiento escénico. Además, tiene experiencia en la docencia, puesto que ha impartido formaciones a diferentes centros de Europa, México y Argentina.
FareWELL
Residencia enero – marzo 2024
«Once you get a clear feel for the basic premise, develop a few safety skills, and get your reflexes primed and ready, then you’re off. You learn by doing» —Nancy Stark Smith
Durante muchos años —prácticamente quince—, Jorge Albuerne entregó su cuerpo a la práctica de la disciplina circense del mástil chino; ni de lejos alcanzando la excelencia, pero siempre ofreciendo su más apasionada dedicación, miles de horas de sudor, cientos de kilómetros caminados en vertical, golpes, moratones, sangre y quemaduras. Sueños compartidos y esa frase destilada: «El mástil come carne humana».
Este proyecto recoge la sublimación de todo ese dolor en segundos de intemporal ligereza, de efímera suspensión, de belleza aérea, de éxito fugaz y al mismo tiempo inextinguible. Ese fuego interior y esa energia nos ofrecían la posibilidad de ser inmortales desafiando la gravedad y nuestros cuerpos. Este proyecto está en fase de construcción y por el momento sólo son páginas y páginas de textos, proyectos de acciones, innumerables imágenes enteladas, garabatos en varios quilos de papel, algunas presentaciones con público, incontables horas en el estudio y partituras inéditas de materiales sueltos de movimiento en el mástil chino almacenados en el cuerpo a la espera de ser de nuevo ejecutados.
Fotografía de cabecera: Grisel Salgado
